La Esquina Rota: Silvia Pinal protagonizó y salvó una de las más grandes películas de la historia / Francisco Félix Durán
Silvia Pinal falleció a sus 93
años, en la CDMX, el 28 de noviembre del año 2024. Icono de la Época de Oro del
cine mexicano y de la televisión nacional, este fin de semana fue homenajeada
en el Palacio de Bellas Artes y recordada en otras partes del mundo.
Si he de ser sincero, conocí a la
última gran diva de México cuando era niño por su programa televiso: Mujer
Casos de la Vida Real, pero fue en mi incursión al cine independiente y gracias
a Luis Buñuel que comencé a admirar ese talento, valentía e irreverencia de
quien fue elegida para tentar a Simón del Desierto.
En ese contexto, me gustaría
hablar de Viridiana, una película dirigida por Buñuel y protagonizada por
Silvia Pinal, que es considerada por la crítica como la mejor obra de la
historia del cine español y de habla hispana, que cuenta con una interesante historia
dentro y fuera del filme.
Viridiana se desarrolla en el
contexto del franquismo. Silvia Pinal interpreta a una novicia que antes de
tomar los hábitos visita la casa de su tío, quien ahora viudo, la convierte en
el objeto de su deseo sin ser correspondido. Por azares del destino y evitar
spoilers, ella nunca regresa al convento y sigue el ejemplo de Jesucristo al
abrir las puetas de la hacienda a los más necesitados.
Lamentablemente y como bien
escribió en Rebelión en la Granja, George Orwell: “Todos los animales son
iguales, pero algunos animales son más iguales que otros”, así fue como en una
oportunidad los mendigos, leprosos y todas las figuras que aparecen en la
biblia cuando se habla de ser buen samaritano, tomaron posesión de la casa y
hasta de los cuerpos, porque la moral que bien proviene de la educación y las
costumbres, no tienen nada que ver con la virtud de nuestra protagonista.
Así que esta blasfemia, más el
hecho de usar imágenes religiosas para sacrilegios, la aceptación del poliamor
y una orgia entre las ovejas del Señor, llevaron al franquismo y al Vaticano a
prohibirla, por lo que en España e Italia no estaba permitido exhibirla o
hablar de ellas en medios de comunicación, esto a pesar de haber ganado la
Palma de Oro en el Festival del Cine de Cannes de 1961.
En ese marco, el franquismo mandó
a quemar todas las cintas y ¿saben a quién le debemos que en su momento y hoy
en día podamos apreciar esta joya del cine? Así es: a la protagonista y heroína
Silvia Pinal, quien huyó de España como persona non grata con la última copia
de la película, llevándose las cintas sin carretes dentro de un abrigo a
México.
Finalmente, me gustaría
recomendar la filmografía de Buñuel en la que participó la diva mexicana y la
consagró a nivel internacional: Viridiana, El Ángel Exterminador y Simón del
Desierto.
P.D. Si piensas que Buñuel son
buñuelos, no las veas.
Comentarios
Publicar un comentario