La revictimización durante los procesos judiciales al igual
que por la prensa sensacionalista, son realidades que se viven en todo el
mundo, especialmente en México, en donde se da a entender que la víctima es
culpable de los sucedido por su forma de vestir, horarios de transitar,
sustancias ingeridas o compañías.
A lo anterior, agréguenle que en primera instancia la mayoría de los policías que deberían proteger a la ciudadanía, son quienes inicialmente se aprovechan de las situaciones de vulnerabilidad y si no me creen, de acuerdo con el “Informe País 2020”, solo el 28 por ciento de la población confía en ellos y aún peor, por debajo de los mismos están los senadores y diputados federales, así como diputados locales y partidos políticos.
Lo anterior, sirva como preámbulo para contextualizar la
película “La bella y los perros”, de la directora tunecina Kaouther Ben Hania, quien nos narra la historia
real de una chica que salió de fiesta, con un vestido supuestamente provocativo y conoció a un joven con quien
salió a caminar en la soledad de la noche. Corte A: Mariam, nuestra
protagonista aparece llorando desesperadamente, había sido violada por varios
sujetos y tenía miedo a denunciar por el cuestionamiento social.
La cinta nos deja muy en claro que del árbol caído todos
quieren hacer leña, pero solo si decides no levantarte, así como Mariam es
convencida por el chico que conoció a hacer valer sus derechos, enfrentándose
al sensacionalismo de la prensa, el chantaje de las autoridades y la falta de
empatía por la manera en que las cosas sucedieron, porque la sociedad machista
supone que si hubiera estado en casa nada hubiera pasado.
Quienes han pasado por situaciones de violencia, abusos o
violaciones, no me dejarán mentir cuando digo que no hay cobijo en las
autoridades judiciales, desde la revisión y toma de fotos de los médicos
legistas, hasta los psicólogos que confrontan a la víctima como si fueran
culpables y los ministerios públicos, que dan por hecho se otorgará el perdón
al agresor o se dejará a medias el proceso. Esto último lamentablemente muchas
veces sucede.
Por ello, el filme “La bella y los perros”, nos muestra a Mariam, una joven estudiante que a pesar de todo lo mencionado y tras descubrir que quienes la debieron proteger la violaron, no cede y prosigue el caso por más extenuante que sea el proceso y con la opinión pública en contra, dejando en claro que debemos confiar en los padres para actuar y resguardarnos. Son los primeros que te van a creer.
Comentarios
Publicar un comentario