En el marco del Día Nacional contra el Abuso Sexual Infantil en México, celebrado el 19 de noviembre, recordé una película española estrenada hace una década, que trata este tema de manera honesta y valiente, demostrando que estos actos pasan dentro del entorno familiar y sin importar el estatus social, en donde la víctima muchas veces termina siendo juzgada. Se trata del filme “No tengas miedo”, del director Montxo Armendáriz.
La película narra la historia de Lucía desde su infancia
hasta sus 25 años, edad en la que carga con el secreto de los abusos sexuales
perpetrados por su padre cuando era niña, cuando un juego de cosquillas y un
“no tengas miedo” se convirtieron en la situación más aberrante de su vida,
retratada en una escena no explicita, pero con una mirada de terror que lo dice
todo.
Lucía pertenece a una familia acomodada, posteriormente de
padres separados y con una serie de alarmas que su madre se niega a ver, por
ejemplo: que al jugar muñecas existen ciertas connotaciones sexuales o el
simple hecho de no quererse quedar sola con él, hasta hacerse daño para
alejarse. Su mamá se niega a ver o sospechar lo que pasa, porque un padre
debería ser el más amoroso y protector con sus hijos o esa es la lógica de
muchas familias.
Lucía a sus 25 años, tiene que enfrentar las consecuencias
psicológicas de lo vivido durante su infancia, el conflicto para relacionarse
con otras personas, el sentimiento afectivo paradójico hacia su padre a quien
quiere después de todo, agregando que cuando decide contarlo, situación que
requiere de muchísimo valor, le llaman mentirosa y en otros casos las víctimas
terminan siendo juzgadas.
“No tengas miedo” es una película para concientizar lo que
muchos se niegan a ver, que en México el 90% de las violaciones contra niñas
ocurren dentro del entorno familiar y que nuestro país ocupa el primer lugar a
nivel mundial en este tipo de casos. Estemos alertas ante cualquier situación
porque nadie es de fiar.
¡Las niñas y los niños no se tocan!
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